Origen del día de muertos

El origen del día de los muertos, no se encuentra curiosamente en México, sino que se encuentra en el origen de la iglesia católica. Ahora te explico:

En el inicio de la iglesia, se pusieron días específicos para recordar y celebrar a los santos y personas que dieron su vida para que las creencias católicas no fueran olvidadas, llamados mártires, sin embargo, todos los días del año no eran suficientes para celebrar a cada uno de ellos, por lo cual, para aquellos que no alcanzaron un día de celebración, se les recuerda el 1° de noviembre, llamado el día de Todos Santos y de los fieles difuntos.

Me podrías decir, ¿y esto que tiene que ver con el día de los muertos?, pues básicamente este fue el origen de nuestra fiesta, pero déjame contarte un poco más.

 

La celebración de Todos Santos y de los fieles difuntos, hasta el siglo IV era llamada Feralia y su día era el 21 de febrero, pero el Papa Gregorio III cambió la fecha al 1° de noviembre.

 

La celebración de los fieles difuntos consistía en visitar las tumbas de los familiares para llevarles flores, limpiarlas y en casa comer algunos dulces y panes.

En Francia durante esta celebración se empezaron a realizar misas para los difuntos a partir del año 998.

Estas costumbres se extendieron por toda Europa y llegaron a México (conocido entonces como la Nueva España) en el siglo XV.

La celebración de Todos Santos y de los fieles difuntos durante el periodo histórico de la colonia, no es muy conocida ya que no se han encontrado muchos documentos que hablen al respecto, sin embargo, se piensa que se realizaba de acuerdo a la moda de la época.


Por lo anterior pensamos que el día de los muertos es una combinación de elementos católicos provenientes de España y de los que hacían los antiguos mexicanos.